Capítulo 80
Capítulo 80
Antes, Victoria podia aguantar porque Beatriz repartia una buena parte del dinero que obtenia de Javier entre ellos.
Pero ahora, Beatriz solo pensaba en disfrutar ella sola, olvidandose por completo de su familia, Victoria ya no podia soportarlo.
Victoria penso “No se puede permitir que Beatriz siga siendo tan ingrata“.
Osmar funció el ceho, como era evidente, no sentia mucho cariño
par Beatriz, y con Luella y Victoria hablando constantemente de ella en sus oidos, también empezaba a ver a Beatriz como una ingrata, Despues de todo, la familia Marchena siempre habia sido adinerada, Beatriz siempre tuvo todo lo que queria desde pequeña, y después, incluso la enviaron al extranjero para formarse,
Incluso la hija de una familia común deberia saber agradecer, y mucho menos Beatriz, que se casó con uno de los hombres más ricos.
En ese momento, no solo no pensaba en devolver el favor a su propia familia, sino que también había insultado a su propio padre cuando llamó Simplemente era una ingrata
¿Podría haberse casado con Javier sin el apoyo de su familia?
Osmar solo una risa fria: “Ahora que se cree con poder, piensa que puede vivir libremente fuera de nuestra familia Marchena, Sin nosotros, ella no es nadat.
“Exacto!“, dijo Lucila, asintiendo vehementemente. “Papé, tenemos que darle una lección, mostrarle de lo que somos capaces“.
A la mañana siguiente.
Beatriz aún dormia bajo los efectos del alcohol.
Mientras tanto, Javier tras haber dormido toda la noche, ya vestido formalmente, miró la hora y se sentó en el asiento trasero del coche, listo
para ir a la empresa.
Pero en el exterior de la empresa, se encontró con Victoria y Lucia
Lucila llevaba un elegante vestido largo, luciendo sumamente adorable con un semblante obediente. Al lado, estaba Victoria.
Javier conocía a esas dos mujeres, la madrastra y la hermanastra de Beatriz
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Por cortesia, asintió con la cabeza
Aunque Victoria era mayor, sentia cierto nerviosismo y timidez frente a alguien de la estirpe de Javier.
“Sr. Mangone“, dijo Victoria, “quiero hablar con usted sobre Beatriz“.
Al escuchar el nombre de “Beatriz, Javier se detuvo
Lucila lo observó más detenidamente, puso una mirada de admiración y respeto y dijo: “Si cuñado, sabemos que está muy ocupado, pero esto es muy importante“.
Javier asintió: “Diganme”
Victoria sonrid amargamente: “Bea, desde pequeña, no tenia buen comportamiento, acosaba a su hermana y le gustaba robar dinero y objetos. No cambio a pesar de los intentos de la familia. Sr. Mangone, usted es una buena persona y no quiero que sufra por ella“,
Javier encontró la situación divertida.
Conocía a una persona, y definitivamente no a través de la boca de su madrastra y hermanastra.
Ademas, incluso si lo que declan fuera cierto, esa era la Beatriz del pasado.
Beatriz había cambiado completamente, era muy distante a como era antes.
“Oh?” Javier sontic despreocupadamente. “No lo habria imaginado“.
“La familia Mangone posee una gran fortuna, y para Bea casarse con usted es un honor“, dijo Victoria con una mirada triste. “Pero tememas que hoga algo malo y cause problemas a la familia. Queriamos informarle sobre su verdadera naturaleza. Es muy buena disimulando“.
“Gracias por advertime“, respondió Javier con palabras cortas pero poderosas, “Por suerte, siempre he tenido un gusto especial por las ‘malos mujeres“.
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